Trhapel

Estos seres poco se parecen a su reverso ya que abandonaron toda interactuación con el mundo para, al contrario que los Arhuanim, esconderse en grutas apartadas donde crearon una sociedad estructurada.

No son violentos, pero algunos de los más inconformistas, los que no se adaptan a las normas de su comunidad, la abandonan o son expulsados, para después emplearse como soldados o mercenarios. Poseen un don especial en introducirse en lugares secretos sin ser vistos ni oídos. 

Son algo más altos que los Arhuanim, de metro veinte al metro cuarenta, pero mucho más ligeros de la media normal a relación con su altura (los más altos apenas pesan veinte kilos). Se cree que esto es debido al volumen de los huesos, más semejantes al de las aves, y del material que lo conforman ya que es mucho más ligero que el resto de razas, pero a la par con más dureza y flexibilidad, contorsionando su cuerpo y pudiéndose meter en sitios imposibles para el resto.

Su cabello suele ser largo y muy fino, de colores oscuros al igual que sus ojos almendrados, semejantes a los Sinak, pero de mayor tamaño. La piel es violácea y gris en sus extremidades. Su rostro es alargado con orejas puntiformes pegadas a la cabeza que pueden desplegar mediante unas membranas para poder escuchar mejor y moverlas asimétricamente en varias direcciones.